La primera superluna de 2015, que tiene lugar cuando el satélite se sitúa en el punto más cercano a la Tierra, se produjo hoy, 18 de febrero. Sin embargo no ha sido una superluna habitual, ya que está en fase nueva, es decir, no se pudo observar en todo su esplendor.
Hasta aquí el hecho cientifico... ahora el mito:
En el Talmud, Lilith era la mujer de Adán y según las leyendas rabínicas, no se quiso someter a su marido y lo abandonó para vivir en la región del aire en donde se convirtió en madre de gigantes y demonios.
En el Talmud, Lilith era la mujer de Adán y según las leyendas rabínicas, no se quiso someter a su marido y lo abandonó para vivir en la región del aire en donde se convirtió en madre de gigantes y demonios.
Esta leyenda es uno de los puntos más oscuros de la tradición judeo - cristiana sobre los orígenes de la humanidad.
La historia de Lilith no fué conocida en la Biblia. No aparece en el Génesis. Allí la única mujer de Adán es Eva, por eso en distintas fuentes se conoció a Lilith como "la olvidada".
Según viejos escritos, la historia fué más o menos así:
Adán tuvo una primera mujer. No se sabe si fué creada por Dios o simplemente si ya estaba allí. Pero lo que es claro es que aparece junto a Adán, y no que fue creada "de Adán" como Eva.
Adán vive con Lilith y engendra hijos con ella, pero las cosas no funcionan tal como debieran porque Lilith no está dispuesta a someterse a Adán. El símbolo de esta sumisión es la posición aceptada como "normal" en el acto sexual.
Lilith se niega a permanecer debajo de Adán y Adán no quiere acceder a la demanda de Lilith que considera esta posición como una señal de inferioridad.
La discusión habría sido: - Si somos iguales, ¿porqué tengo que estar siempre yo abajo y tú arriba?- Entonces Adán llegó a quejarse a Dios, quien al parecer se puso de su parte, por lo que Lilith acabó revelándose abiertamente contra Adán y contra Dios, abandonando voluntariamente el Paraíso.
Luego Dios, envió a sus ángeles para que convencieran a Lilith de regresar con el argumento de que "la mujer desea al hombre y ha de seguirle", pero Lilith no quiso saber nada de esto y fue maldecida, convirtiéndose en demonio y viviendo, según las distintas versiones, en la región del aire, en las orillas del Mar Rojo o en el fondo del mar. Desde entonces, ella y sus hijos atormentan a los seres humanos durante el sueño. Las leyendas cuentan que cuando Adán y Eva fueron expulsados del paraíso, Adán intentó reencontrarse con Lilith, y ella, que ya no existía en el plano físico, salía del fondo del mar para encontrarse con él en sueños. También se dice que la verdadera razón de la enemistad entre Caín y Abel fue el deseo de ambos por poseer a Lilith.
Esta desgraciada leyenda, demuestra el rechazo de la dualidad que existía en aquellos tiempos en los que comenzaba a escribirse nuestra historia. Este rechazo lógicamente tiene que ver con una época de fuerte predominio Solar como lo fue la Era de Aries, (que comprende aproximadamente unos 2000 años antes de Cristo). Una de las características de esa época fue la implantación del culto al Dios Único, representado siempre en forma masculina, lo que hacía que cualquier representación de la energía femenina tuviera que ser relegada a un segundo término y si eso no era aceptado (como en el caso de Lilith), la condena era inevitable, ya que la oposición (que de por si signifíca eje, complemento, igualdad de fuerzas) no podía existir.
Pero también podría ser otra la perspectiva de la historia y no considerarla como algo negativo en nuestras vidas.
Proserpina adquiere en el reino de Plutón la sabiduría secreta que transforma su esencia enriqueciéndola, y así junto a la imagen clara y luminosa de la diosa primaveral, aparece Perséfone oscura y velada.
La Luna Negra en lugar de Lilith debería ser Perséfone, la imagen del principio oscuro femenino que no depende ya del conciente y que, sin necesidad de someterse al principio masculino, busca su propio camino más allá de la influencia luminosa solar.
Nuestro universo es dual y no es por casualidad por lo que existen el día y la noche, y que mientras la mitad de nuestro planeta está iluminado por el Sol, la otra mitad permanezca en las relativas tinieblas que permiten ver las estrellas.
El excesivo predominio de una de las dos fuerzas, produce el desequilibrio de la energía planetaria.
La identificación de la Luna Negra con la leyenda de Lilith es absolutamente válida, pues la Luna Negra ha sido olvidada por unos, abiertamente rechazada por otros, o considerada como un factor maléfico.
De acuerdo con los mitos de la antigua Grecia y Roma, otra sería la forma de ver a nuestra Luna Negra.
La leyenda cuenta que Proserpina (personificación de la Primavera), hija de Deméter (la Tierra), es raptada por Hades (Plutón), el cual ha surgido de las profundidades en un carro de oro mientras Proserpina cortaba flores en un campo de narcisos. El rapto cuenta con la complicidad de Hécate (imagen de la Luna Nueva) que lo observa todo escondida en su cueva. Deméter intenta por todos los medios recuperar a su hija, y al fin lo logra; pero Proserpina ha comido los frutos del reino de Plutón, hay en ella algo nuevo y ya no puede vivir aparentemente en la superficie a la luz del Sol. Es ya la Reina de los Infiernos, y durante la mitad del año reside en el mundo subterráneo.
La dualidad rechazada en el mito de Lilith, aparece triunfante en el de Perséfone.
La dualidad ha sido representada a través de los milenios por símbolos universales como el YING y el YANG.