miércoles, 18 de febrero de 2015

Luna Negra

La primera superluna de 2015, que tiene lugar cuando el satélite se sitúa en el punto más cercano a la Tierra, se produjo hoy, 18 de febrero. Sin embargo no ha sido una superluna habitual, ya que está en fase nueva, es decir, no se pudo observar en todo su esplendor.

Concretamente, según ha explicado el astrónomo Richard Nolle, la Luna se situó en su punto más cercano al planeta tan sólo 8 horas después de encontrarse en su fase nueva. Esto quiere decir que se vió como un hilo fino justo antes del amanecer. Esta situación ha provocado la controversia entre los expertos, algunos de los cuales no consideran este caso como el de una superluna, precisamente porque no puede observarse.


Otros llaman a este fenómeno "luna negra", aunque esta denominación también se usa para la tercera de las cuatro lunas nuevas de la temporada (desde el solsticio de diciembre al equinoccio de marzo). La próxima superluna se registrará el próximo 20 de marzo y también será con luna nueva. Sin embargo, ese día el satélite pasará por delante del Sol, produciéndose un eclipse total que podrá verse en las latitudes árticas, Groenlandia, Islandia, Europa, norte de África y Asia nororiental.


Hasta aquí el hecho cientifico... ahora el mito:

En el Talmud, Lilith era la mujer de Adán y según las leyendas rabínicas, no se quiso someter a su marido y lo abandonó para vivir en la región del aire en donde se convirtió en madre de gigantes y demonios.


Esta leyenda es uno de los puntos más oscuros de la tradición judeo - cristiana sobre los orígenes de la humanidad.

La historia de Lilith no fué conocida en la Biblia. No aparece en el Génesis. Allí la única mujer de Adán es Eva, por eso en distintas fuentes se conoció a Lilith como "la olvidada".

Según viejos escritos, la historia fué más o menos así:

Adán tuvo una primera mujer. No se sabe si fué creada por Dios o simplemente si ya estaba allí. Pero lo que es claro es que aparece junto a Adán, y no que fue creada "de Adán" como Eva.

Adán vive con Lilith y engendra hijos con ella, pero las cosas no funcionan tal como debieran porque Lilith no está dispuesta a someterse a Adán. El símbolo de esta sumisión es la posición aceptada como "normal" en el acto sexual. 

Lilith se niega a permanecer debajo de Adán y Adán no quiere acceder a la demanda de Lilith que considera esta posición como una señal de inferioridad. 

La discusión habría sido: - Si somos iguales, ¿porqué tengo que estar siempre yo abajo y tú arriba?- Entonces Adán llegó a quejarse a Dios, quien al parecer se puso de su parte, por lo que Lilith acabó revelándose abiertamente contra Adán y contra Dios, abandonando voluntariamente el Paraíso.

Luego Dios, envió a sus ángeles para que convencieran a Lilith de regresar con el argumento de que "la mujer desea al hombre y ha de seguirle", pero Lilith no quiso saber nada de esto y fue maldecida, convirtiéndose en demonio y viviendo, según las distintas versiones, en la región del aire, en las orillas del Mar Rojo o en el fondo del mar. Desde entonces, ella y sus hijos atormentan a los seres humanos durante el sueño. Las leyendas cuentan que cuando Adán y Eva fueron expulsados del paraíso, Adán intentó reencontrarse con Lilith, y ella, que ya no existía en el plano físico, salía del fondo del mar para encontrarse con él en sueños. También se dice que la verdadera razón de la enemistad entre Caín y Abel fue el deseo de ambos por poseer a Lilith. 

Esta desgraciada leyenda, demuestra el rechazo de la dualidad que existía en aquellos tiempos en los que comenzaba a escribirse nuestra historia. Este rechazo lógicamente tiene que ver con una época de fuerte predominio Solar como lo fue la Era de Aries, (que comprende aproximadamente unos 2000 años antes de Cristo). Una de las características de esa época fue la implantación del culto al Dios Único, representado siempre en forma masculina, lo que hacía que cualquier representación de la energía femenina tuviera que ser relegada a un segundo término y si eso no era aceptado (como en el caso de Lilith), la condena era inevitable, ya que la oposición (que de por si signifíca eje, complemento, igualdad de fuerzas) no podía existir.

Pero también podría ser otra la perspectiva de la historia y no considerarla como algo negativo en nuestras vidas.

Proserpina adquiere en el reino de Plutón la sabiduría secreta que transforma su esencia enriqueciéndola, y así junto a la imagen clara y luminosa de la diosa primaveral, aparece Perséfone oscura y velada.

La Luna Negra en lugar de Lilith debería ser Perséfone, la imagen del principio oscuro femenino que no depende ya del conciente y que, sin necesidad de someterse al principio masculino, busca su propio camino más allá de la influencia luminosa solar.

Nuestro universo es dual y no es por casualidad por lo que existen el día y la noche, y que mientras la mitad de nuestro planeta está iluminado por el Sol, la otra mitad permanezca en las relativas tinieblas que permiten ver las estrellas.

El excesivo predominio de una de las dos fuerzas, produce el desequilibrio de la energía planetaria.

La identificación de la Luna Negra con la leyenda de Lilith es absolutamente válida, pues la Luna Negra ha sido olvidada por unos, abiertamente rechazada por otros, o considerada como un factor maléfico.

De acuerdo con los mitos de la antigua Grecia y Roma, otra sería la forma de ver a nuestra Luna Negra.

La leyenda cuenta que Proserpina (personificación de la Primavera), hija de Deméter (la Tierra), es raptada por Hades (Plutón), el cual ha surgido de las profundidades en un carro de oro mientras Proserpina cortaba flores en un campo de narcisos. El rapto cuenta con la complicidad de Hécate (imagen de la Luna Nueva) que lo observa todo escondida en su cueva. Deméter intenta por todos los medios recuperar a su hija, y al fin lo logra; pero Proserpina ha comido los frutos del reino de Plutón, hay en ella algo nuevo y ya no puede vivir aparentemente en la superficie a la luz del Sol. Es ya la Reina de los Infiernos, y durante la mitad del año reside en el mundo subterráneo.

La dualidad rechazada en el mito de Lilith, aparece triunfante en el de Perséfone. 

La dualidad ha sido representada a través de los milenios por símbolos universales como el YING y el YANG.


miércoles, 11 de febrero de 2015

El Marino

¿El Marino?, ¿el marinero?, ¿que es que? ¿quien es quien?...

Nos dice la RAE:
marino, na.(Del lat. marīnus).
  •  1. adj. Perteneciente o relativo al mar.
  •  3. m. Hombre que se ejercita en la náutica. 
marinero, ra.(De marina).

  •  1. adj. Dicho de una embarcación: Que posee las características necesarias para navegar con facilidad y seguridad en todas circunstancias.
  •  2. adj. Perteneciente o relativo a la marina o a los marineros.
  •  3. adj. Semejante a cualquier cosa de marina o de marinero.
  •  4. m. y f. Persona que presta servicio en una embarcación.

¿Pero solamente es eso?  Para mi, un marino es un poeta, quizás un poeta frustrado, pero un poeta, que escribe sus versos con la caña del timón, usando como papel la lámina del mar. Un poeta que traza sus poemas mediantes rumbos, derrotas, arribadas, un poeta que linea a linea, usando tinta de vientos, unas veces portantes, otras de través, va derramando sus sueños, sus pensamientos, sus anhelos, desilusiones, sus sueños... lentamente.
Para mi, un marino es esa persona que sueña, que anhela, que desea... para mi, un marino no es más que un cúmulo de ilusiones hechas carne, un cúmulo de sueños ya soñados.
 
No creo que la técnica haga al marino, un marino ha de hacerse a base de sueños, a base de rumbos nunca navegados, un marino es un soñador de travesías...

¿Lo demás?... solo es un tripulante, con mayor o menor graduación, pero solo un tripulante.

Marinos fueron Colón, Magallanes, Elcano, Churruca, Tabarly... y otros miles y miles que un día soñaron un rumbo, una derrota. Que un día consiguieron embarcarse en una loca aventura, contra todas las opiniones sensatas de los que les rodeaban.

Marinos son aquellos que tras un largo viaje interior, se embarcan en una incierta travesía, muchas veces solitaria, sin seguridad de arribar a puerto abrigado, pero se embarcan en ella.

Los demás... son solamente tripulantes.

Puede que haya quien no esté de acuerdo conmigo, puede que haya otras miles de definiciones para un marino, pero esta es la mía.

Barcos

Muchos barcos llaman mi atención, unos por clásicos, otros por bellos, otros... sencillamente por que me han llamado...

Muchos de ellos, son esos barcos que se mueren en un pantalán, solos, en esa muerte lenta que llena todo barco que no navega...

Algunos han sido abandonados hace tiempo, por la dejadez o la falta de ilusión de sus dueños/armadores, otros... sufren el abandono de estos tristes días que vivimos, de crisis económica, barcos que vivieron días mejores, días felices, días de mar. Velas blancas, izadas, bien trimadas... con mar de popa, con viento de través... cortando el agua a 5 nudos, ciñendo... barcos navegando, barcos haciendo aquello para lo que fueron construidos... barcos.

Barcos cercanos, barcos lejanos... barcos que te llaman desde el pantalán diciéndote "sálvame, navégame, déjame que te lleve, siénteme..."

Barcos que desean sentir tu mano en su caña. Barcos que desean hablarte... Barcos.

Barcos caros, barcos baratos, barcos que como la vida misma, necesitan muchas horas, días de reparación...

Barcos que tienen historias que contarte, barcos que llevan toda una historia en sus cuadernas, barcos que han visto el amor, el abandono, la mar plácida, la mar bravía...

Barcos que un día arribaron a puerto y nunca más soltaron amarras... esos barcos son los que me llaman... "sálvame, navégame, déjame que te lleve, siénteme..." Barcos.

El Faro

Esa luz, que en medio de la negra oscuridad de la noche marina nos muestra el rumbo, esa luz que nos avisa de nuestra arribada o nos previene de los peligros... esa luz que tantas veces hemos creído, querido, deseado ver... luz... dos segundos... luz...

Esa luz parece que ha vuelto a brillar, ¿o quizás es solamente mi deseo y mis ilusiones?...

Luz... dos segundos... luz... y así hasta el infinito.

Sé que una vez fije el rumbo ayudándome de ella, la superaré, mi ruta me lleva hacia otros derroteros, lejos de los rumbos conocidos, adentrándome en nuevos mares, no por desconocidos menos deseados y anhelados

Luz... dos segundos... Luz

Tu, pequeño faro de Sacratif, que tantas noches has iluminado mis sueños, tu que de niño me enseñaste como arribar a puerto... se que te volveré a dejar por mi popa... pero siempre estarás ahí.

Luz... dos segundos... Luz